En el marco de la jornada electoral que se desarrolla en la ciudad, donde la afluencia de votantes en los establecimientos educativos aún se mantiene baja, también hay espacio para la solidaridad y la ternura. Al ingresar a la escuela Lidia Rosa Montellano de Sidorenko, los ciudadanos se encuentran con una particular sorpresa: una caja con gatitos en busca de un hogar.
Se trata de dos michicitos de pelaje negro que esperan ser adoptados por una familia que les brinde amor, cuidado y un lugar cálido donde crecer. La iniciativa, espontánea y conmovedora, recuerda que en medio del ejercicio cívico también es posible tender una mano —o una caricia— a quienes más lo necesitan.
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Ignacio Vilte
Locales07/05/2025Lo más visto
