La fiscalía desmantela la defensa de Alberto en la denuncia por violencia de género de Fabiola
Política05/11/2024El fiscal federal Ramiro González solicitó la indagatoria del expresidente Alberto Fernández por su implicación en diversos hechos de violencia de género contra su expareja, Fabiola Yañez. El exmandatario enfrenta acusaciones que apuntan a tres de los nueve episodios de agresión que se investigan desde que se abrió el caso. En su resolución, el fiscal desarmó la defensa de Fernández, que había intentado desviar las acusaciones mediante explicaciones sobre los moretones en el cuerpo de Yañez.
Según la fiscalía, las excusas presentadas por el expresidente, que atribuían los hematomas a tratamientos estéticos o caídas por abuso de alcohol por parte de Yañez, carecen de fundamento y fueron desmentidas por la evidencia y los testimonios recopilados durante la investigación. Las fotografías y videos que registraron las lesiones de Yañez, que se hicieron públicas, fueron consideradas por el fiscal como prueba concluyente de que los golpes fueron infligidos por Fernández.
En su escrito, González cuestionó duramente la estrategia de la defensa, que buscó desprestigiar a la víctima a través de estereotipos y prejuicios. La abogada de Fernández, Silvina Carreira, había argumentado que las marcas en el rostro y el cuerpo de Yañez se debían a intervenciones estéticas, y que en otras ocasiones las caídas de la ex primera dama, atribuibles al exceso de alcohol, serían las responsables de los moretones. Sin embargo, la fiscalía desestimó estas versiones, señalando que se trataba de intentos para desviar el enfoque de la responsabilidad del acusado.
En cuanto a los testigos propuestos por la defensa, que negaron cualquier agresión física o verbal, el fiscal calificó sus declaraciones como "de valor nulo" para el desarrollo del caso. A través de estas declaraciones, la defensa buscó instalar una narrativa que descalificaba la credibilidad de Yañez, acusándola de tener un comportamiento errático y responsabilizándola de los hechos. Según González, este tipo de planteos son una forma de "enjuiciamiento basado en estereotipos", que en lugar de desvirtuar las pruebas, buscan centrar la investigación en la víctima y sus posibles defectos personales.
El fiscal también destacó el peligro de que tales enfoques afecten el proceso judicial, al permitir que se manipule la percepción pública de la víctima. En ese sentido, hizo referencia al uso de términos despectivos y reductivos, como los que señalaban que Yañez sería una "borracha", una "mala madre" o que tendría "múltiples personalidades". Para González, estas acusaciones no solo eran injustas, sino que constituían un intento de desviar la responsabilidad de Fernández sobre lo que ocurrió.
Finalmente, el fiscal pidió al juez Julián Ercolini que excluyera estas declaraciones y que continuara con la investigación, permitiendo que se avance hacia la indagatoria de Alberto Fernández. La solicitud de indagatoria marca un paso importante en el caso, y la resolución de la fiscalía deja claro que se trata de un proceso serio de violencia de género, donde la defensa de Fernández será puesta a prueba frente a las pruebas acumuladas y la gravedad de las acusaciones.