Ayer se dio una situación atípica y tensa en la Catedral Basílica de Salta, luego de que tres mujeres se encadenaran en uno de los bancos del templo. Se trata de autoconvocadas que reclaman por mejoras salariales para el área de Salud, quienes pedían que el Arzobispado intercediera en el conflicto. Terminaron denunciadas.
"Al mediodía apagaron las luces, y entró la Policía diciendo que había una denuncia en nuestra contra porque habíamos tomado la Catedral, pero eso no es cierto, lo único que queríamos era que la Iglesia intercediera por nosotros, nos quieren tratar como delincuentes", reclamó una de las huelguistas.
Luego de que fueron desalojadas en su medida de fuerza al frente de la Catedral, se hizo presente Frida Fonseca, Secretaria de Seguridad de la Provincia y mantuvo un extenso diálogo con las manifestantes. "Es la única que mostró empatía con nosotras", señalaron tras su desición de seguir con el acampe de la Plaza 9 de Julio.